Exposición de Helen Clark sobre la lucha contra la delincuencia y la corrupción en la MAPE de oro

En el evento de Chatham House y el Consejo Mundial del Oro (WGC) sobre la Lucha contra la minería ilegal de oro: prioridades de políticas internacionales, la M. Hble. Helen Clark, presidenta del Consejo EITI, se refirió al papel de la transparencia en la minería artesanal y de pequeña escala de oro y la necesidad de colaborar internacionalmente para enfrentar la corrupción, la delincuencia y los conflictos.

Agradezco la invitación para contribuir al debate de hoy sobre este tema de gran importancia, y quiero agradecer también al muy honorable Dominic Raab y a David Tait y su equipo del Consejo Mundial del Oro por la labor realizada en el informe “Silence is Golden” (“El silencio vale oro”, en español).

Quisiera comenzar destacando algunos aspectos del sector de la minería artesanal y de pequeña escala.

El primero es la dificultad de recolectar datos sobre la minería artesanal y de pequeña escala. Se estima que es una actividad que desarrollan entre quince y veinte millones de personas en todo el mundo y que posiblemente sea el segundo mayor medio de vida rural de África.

En segundo lugar, se estima que, en la actualidad, la minería artesanal y de pequeña escala produce hasta una quinta parte del oro extraído recientemente, lo cual representa un aumento del cuatro por ciento desde la década de 1990.

En un contexto en el que el precio del oro ha crecido de forma sostenida en los últimos dos años especialmente, queda claro que la minería de oro artesanal y de pequeña escala es una importante fuente de ingresos en todo el mundo. Por lo tanto, debería poder contribuir de forma significativa a la economía de las comunidades que llevan a cabo esta actividad.

En la práctica, sin embargo, la situación de quienes se dedican a la MAPE puede ser muy distinta, ya que, tristemente, son muy raros los casos en que la minería artesanal genera prosperidad para quienes la desarrollan. El sector es más propenso a estar asociado a la degradación ambiental, el uso de mercurio, el trabajo infantil y controles de salud y seguridad deficientes (o incluso inexistentes).

Además, existen pruebas de que la minería ilegal está teniendo una incidencia cada vez mayor en la delincuencia internacional, la corrupción y los conflictos. El Gobierno de los Estados Unidos, por ejemplo, ha llamado la atención sobre la influencia que tiene el oro producido de manera ilegal y artesanal en el financiamiento de conflictos en la región de los Grandes Lagos.

Este último informe del Consejo Mundial del Oro busca enfrentar este complejo escenario de la MAPE, proponiendo modos de avanzar en el desarrollo de una mayor colaboración internacional para luchar contra la corrupción, el terrorismo y la delincuencia internacional. Dicho de otro modo, para combatir aquellas actividades que hacen que los ingresos inevitablemente terminen en manos que no son las de quienes realmente deberían beneficiarse.

Si bien la regulación es necesaria para abordar los impactos de la MAPE en el ambiente, la salud y la seguridad, la acción internacional es fundamental para enfrentar las redes globales que impulsan la corrupción, el terrorismo y la delincuencia.

El desarrollo de un marco de actuación conjunta por parte del Consejo Mundial del Oro es un paso muy valioso, que complementa otras iniciativas.

Existe un enorme potencial en este ámbito para colaborar con el EITI, cuya presidencia ejerzo actualmente. La presentación de informes basada en el Estándar EITI actualizado en 2023 puede ayudar a brindar nuevos datos de más de cincuenta países, muchos de los cuales poseen grandes sectores de MAPE. Entre ellos se encuentran Burkina Faso, Colombia, RDC, Ghana, Indonesia y Mali.

Es por ello que el EITI está deseoso de trabajar con diversas partes interesadas internacionales, como el Consejo Mundial del Oro, a fin de indagar sobre cómo acelerar la divulgación de datos que puedan contribuir a generar soluciones positivas para los desafíos que enfrenta la MAPE. Es importante que las personas que se dedican a la MAPE, que a menudo se encuentran entre las más vulnerables, puedan aspirar a trabajar en entornos más previsibles y seguros y obtener un mayor provecho de su trabajo y de los recursos que extraen.

Enfrentar el financiamiento de la delincuencia, el terrorismo y los conflictos es crucial para promover este objetivo y para sentar las bases de un entorno geopolítico y geoeconómico más estable en beneficio de todos.