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Los Papeles de Panamá y las innovadoras normas del EITI para la divulgación de información sobre los propietarios

El EITI es un estándar para los países con petróleo, gas y minerales. Los 51 países que forman parte del EITI requieren que todas las empresas de extracción de petróleo, gas y minerales publiquen lo que pagan en concepto de impuestos y regalías, y el gobierno se compromete a publicar lo que recibe así como información clave sobre el sector. Los primeros hallazgos obtenidos concluyeron que este tipo de información representó un buen punto de partida, pero que no ha sido suficiente. Si la transparencia es un medio para combatir la corrupción y mejorar la rendición de cuentas, es importante incluir a aquellas personas que realmente poseen los derechos de extracción. Esto no suele ser un problema con grandes empresas que cotizan en bolsa o empresas de titularidad nacional pero, en el caso de empresas de propiedad privada, resulta difícil identificar a los verdaderos propietarios detrás de la empresa. A menudo se desconoce la identidad de los titulares reales —los beneficiarios reales— de las empresas que han obtenido derechos para extraer petróleo, gas y minerales, oculta tras una serie de entidades corporativas que no rinden cuentas. Con frecuencia se requiere que empresas internacionales se asocien con empresas acerca de las cuales dicen saber poco. También ocurre que las empresas adquieren otras empresas pretendiendo no conocer plenamente su historial. La transparencia de los pagos, por tanto, ha de ir acompañada por la transparencia de quién efectúa los pagos, de las empresas y quién está detrás de ellas.

La transparencia de los ingresos sin una transparencia sobre los propietarios se asemeja a una situación en la que los automóviles llevan matrículas pero se mantiene en secreto el registro de los titulares de las matrículas, incluso para el propio gobierno. 

Las personas que viven en países ricos en recursos corren el riesgo especialmente de salir perdiendo cuando los activos extractivos suelen asignarse de forma inadecuada a causa de la corrupción. Se ha estimado que los países en desarrollo pierden 1 billón de USD cada año como resultado de tratos corruptos o ilegales, en muchos de los cuales están implicadas empresas anónimas. 

Esta es la razón por la que los 51 países que forman parte del EITI acordaron a principios de este año aprobar nuevas normas sobre la presentación de informes sobre los titulares

  • De aquí a 2020 se requiere que los 51 países soliciten información sobre los beneficiarios reales, y que las empresas la revelen, en los Informes EITI nacionales. El nombre, la nacionalidad, y el país de residencia del propietario de las empresas que licitan, invierten en, u operan con activos extractivos, debe ser divulgado. Esto es importante en la medida en que los gobiernos implementadores del EITI deberán conocer a partir de ahora quién posee las empresas que manifiesten un interés en los activos extractivos y podrán, por tanto, tener en cuenta esta información antes de decidir la concesión de activos extractivos lucrativos a una empresa.
  • Las personas expuestas políticamente deberán ser identificadas.
  • Este mismo año, los 51 países deberán elaborar y aprobar hojas de ruta sobre cómo llevar a cabo la presentación de informes sobre beneficiarios reales.

Véase además el Requisito 2.5 en la página 20 del Estándar EITI en inglés.

La atención y el debate recientes respecto a la presentación de informes sobre los beneficiarios reales son bienvenidos. A través del EITI, los 51 países también están actuando colectivamente de una forma sin precedentes.

Los papeles de Panamá confirman que las personas que están detrás de la extracción de petróleo, gas y minerales también pueden usar sociedades ficticias para ocultarse. El interés en bloquear las posibilidades para ocultar dinero en lugares como Panamá son bienvenidos. Pero esto no podrá poner fin por sí solo al secreto financiero que facilita la evasión de impuestos y la corrupción. Deberá acompañarse de mejores normas y su cumplimiento en países donde el dinero se genera en primer lugar, y es por ello que los nuevos requisitos del EITI sobre los titulares son tan importantes.

No será fácil para muchos de los 51 países del EITI poner en práctica de forma efectiva leyes, reglamentos y procedimientos para dar efecto a los nuevos requisitos del EITI. El Secretariado Internacional del EITI ha estimado que costará unos 14 millones de USD durante los próximos tres años.

La comunidad internacional, las agencias de desarrollo, los centros de excelencia y las organizaciones multilaterales como la OCDE, así como los esfuerzos conjuntos como el propio EITI, deben ahora hacer su parte asegurando que los países pobres con sistemas débiles cuenten con los recursos financieros y la capacidad para poner fin a la opacidad sobre los titulares a la hora de vender los recursos naturales de sus países.

Para saber más respecto a los requisitos sobre los beneficiarios reales del EITI, consulte nuestra hoja informativa.

Para obtener más información, póngase en contacto con Victor Ponsford (vponsford@eiti.org)